10.09.2006

milab-no-tulab

tarta de manzana contra-reembolso...

Ella es pequeñita, casi tanto, que cabe en mi corazón, Vive a tres dedos, dos baldosas y una oración, a la sombra de un ficus que soñaba ser malvón, yo me aprendí el camino, preguntado a los vecinos, me dijeron que siguiera, a manzanas el olor, encontré como destino, un juego de azar canino, unas guitarras diestras y una costa de cartón, ella es así como nada, cuando nada es casi todo, cuando todo es mejor, me han contado con certeza, en una rara sobremesa, que Julio le escribirá una carta y Joaquín se la hará canción, la canción de las sonrisas, la sonrisa que me arrancó, que no tiene melodía, pero huele a tango y rock, ella sueña entre sueños, que el sur le pertenece, que Alicia la invitó, a un lugar que no existe, a uno que se inventó, aquí colecciona siestas, refranes, fotos, mates, amor, se sumerge en las acequias que nos llegan al talón, acequias quimera de río, que llegan adonde voy yo, con sabor a margaritas y algunos que otros días, de zapata en el corazón, María te convida fuego, por el tabaco que se olvido, y te regala si tiene ganas, una buena explicación, por eso y por esto, por de nada y por perdón, tiene por pretendientes, la luna de Bariloche, la sombra del aconcagüa, y el cielo que nos parió…