5.08.2006

cosas pequeñas...

Me gustaba darte cosas pequeñas, como mi alma, mi sonrisa
Tú las tomabas, te las bebías y las comparabas con la libertad
Me gustaba robarte cosas grandes como tu bondad,
Como tu corazón, y tú te hacías afín al saqueo
Muy propio de mis dedos, cortitos pero certeros,
Sabias llevar a punto como el tejido de una abuela, mis ganas de volar
La intemperie de mis esperanzas por estas calles menducas
Yo a lo mejor no comprendí bien tu vasito, pero sabía entenderlo
Y vos seguramente no querías entender tus propias instrucciones
Así fue como te nombré cruz del sur y decidiste mirar hacia el norte
Así fue que camine al norte y te enamoraste de la cruz del sur
Yo solo necesitaba que transformaras al león en un minino dócil
Y aprendí a maullar a tus faldas y me quede sin garras para defenderme
Y la ciudad fue un zoológico y tu ojos las llaves de la jaula
Solo que le temiste al noble arte de los cerrajeros del corazón
Y me quede sentado mirando tu espalda
Como el mapa frío de las carreteras que no llevan a ningún lugar,
Aun hoy estas ahí, pero te niegas a estar, y yo en tu subsuelo resucito de a ratitos
Y me siento un fulano a la vida, a tus alegrías que ahora muy poco son mías
Me queda frío el mate entre tangos y sabina,
Ese mate que me regalaste a cambio de un rato en mis manos,
Yo quería invitarte hoy, pero no me has oído,
A un momento de nuestras charlas, de nuestras escapadas que tanto amabas,
Yo quería invitarte hoy, pero no me has oído,
O no has querido oírme.

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